Si empiezas a notar que las encías te están dando problemas y empiezan a inflamarse o sangran cuando te cepillas los dientes, quizás estés ante un problema de gingivitis.
La gingivitis, también conocida como la inflamación de las encías, es una etapa inicial a la enfermedad de las encías y que se puede tratar sin ningún tipo de problema. Sin embargo, esto puede progresar hasta afectar a todo el hueso que rodea y soporta los dientes e, incluso derivar en una periodontitis.
Si quieres conocer más sobre qué es lo que está provocando el sangrado de encías y cómo solucionarlo, en Implanteoral Milladoiro te resolvemos todas las dudas.
Factores del sangrado de encías
Existen varias razones que pueden causar gingivitis pero, sin duda, una de las principales causas es la acumulación de placa bacteriana en la línea de las encías.
Esto suele darse, sobre todo, cuando no se realiza una higiene dental frecuente y no se retira la los restos de comida que se acumula bajo las encías y entre los dientes. Estas bacterias y restos se convierten en una película fina y pegajosa a la que se llama placa dental, derivando en la enfermedad de las encías.
Otro factor se produce cuando se consume hidratos de carbono. Las bacterias que están presentes en la boca rompen estos hidratos y producen ácido, que junto con la saliva, forman la placa a través de los dientes. Esta puede llegar a ser dura o tártaro. Si es en forma de tártaro se sujeta más firmemente y tan solo se puede retirar por un dentista.
Además, para aquellos con una boca seca la aparición de gingivitis puede ser más común ya que la saliva sirve como protección de las encías. También, se ven más afectados los fumadores o las personas con diabetes, dado que estos últimos tienen un nivel más alto de azúcar de sangre y una inmunidad más baja.
Soluciones a la gingivitis
Una vez que ya se conocen las causas que provocan la aparición de la gingivitis, se hace necesario tomar medidas para combatirla.
Cabe destacar que esta enfermedad no provoca dolor por lo que puede pasar desapercibida. Sin embargo, si se nota que las encías están más rojas o que de costumbre o inflamadas y se produce sangrado de las encías durante el cepillado, se debería acudir al dentista de inmediato.
Inicialmente, se realiza una exploración para comprobar si realmente se trata de un problema de gingivitis. En caso afirmativo, el tratamiento que se realiza consiste principalmente en la eliminación de la placa y el sarro acumulados en la línea de las encías. Concretamente, se realizan las siguientes tareas:
Limpieza dental.
Esta limpieza consiste en la eliminación de todos los restos de la placa, sarro y productos bacteriano. Este proceso se conoce con el nombre de raspado y alisado radicular y se puede realizar con instrumentos, un láser o un dispositivo ultrasónico.
Restauración dental.
Los dientes desalineados, coronas, puentes o otro tipo de restauración dentales con ajuste deficiente pueden llegar a irritar las encías y dificultar la eliminación de placa durante la higiene dental que se realiza de forma diaria. Si se dan estos casos, el dentista dará indicaciones sobre cómo solucionar estos problemas.
Atención continua.
Aunque la gingivitis por norma general se cura tras realizar la limpieza dental profunda, es importante vigilar la evolución del tratamiento. El dentista puede establecer una serie de controles y limpiezas profesionales a realizar posteriormente para mantener una buena salud dental.
Ahora que ya conoces todo sobre la gingivitis es posible que te dieras cuenta que tal vez tú mismo tengas ese problema dental. Si es así, no dudes en contactar con nosotros para que recuperemos tu preciosa sonrisa.